¿Sabías que es importante desinfectar periódicamente el agua de la pileta? Aunque se vea clara y transparente, pueden vivir en ella miles de microorganismos y bacterias nocivos para la salud. Un buen tratamiento químico, limpieza y filtrado te van a ayudar a terminar con ellos.
Hoy en día existen en el mercado una gran variedad de productos químicos para tratar el agua de la pileta. Podemos distinguir básicamente dos tipos de tratamientos: el de tipo bacteriológico y el estabilizador. Mientras que el primero se ocupa de erradicar bacteria y parásitos, el segundo sirve para mejorar el estado del agua para evitar reacciones alérgicas en los bañistas.
En cuanto a los productos desinfectantes podemos optar por dos tipos: clorados y no clorados. Entre los desinfectantes clorados más habituales encontramos el hipoclorito sódico (lavandina o cloro líquido), el hipoclorito cálcico (granulado o en pastillas), el discloroisocianurato sódico (sal sódica) y el ácido tricloroisocianúrico (tricloro). Este tipo de productos produce cambios sobre el valor del ph del agua para mantener el agua limpia por más tiempo. Su rendimiento es variable y depende principalmente de la incidencia solar, el número de bañistas y el nivel de contaminación del agua.
Por otra parte, los productos desinfectantes no clorados que más se utilizan son el clorhidrato de polhexametileno biguanida (acción bactericida), el bromo (destruye microorganismos y algas), el ozono (oxidante y esterilizante potente), los iones de cobre y plata (antialgas, desinfectante y floculante), el carbón activo (evita la formación de algas y la transmisión de enfermedades contagiosas), y el oxígeno activo (previene la formación de algas y el agua turbia). Todos los tipos de cloro son recomendables, lo más importante es que se coloque todos los días. Las pastillas brindan la comodidad que se disuelven al contacto con el agua y de ese modo va "clorando" el agua de la pileta. El Hipoclorito (cloro líquido) es un poco mas eficiente en la aplicación y tiende a elevar el PH del agua.
Otra opción válida para desinfectar la pileta y mantenerla limpia todo el año es el sistema de electrólisis salina. Este método es cada vez más habitual en piscinas residenciales y consiste en generar cloro a partir de la sal común, disuelta en el agua. Gracias al proceso de electrólisis (oxígeno activo) que genera y combina el cloro y otros agentes, la desinfección resulta exitosa. Este sistema es sumamente recomendado por los especialistas del sector de las piletas por sus resultados y porque es ecológico y económico (supone el reemplazo total de otros productos químicos).
Tratamientos estabilizadores: Cómo medir el ph del agua
El ph es el índice de acidez o neutralidad del agua y debe mantenerse entre los 7,2 y 7,6 puntos. Con un simple kit de medición de ph vas a poder conocer y corregir diariamente el nivel de ph del agua de tu pileta. Tené en cuenta que si el nivel del mismo es demasiado alto la efectividad del cloro se verá reducida, se producirán precipitaciones de cal y será nocivo para la piel y las mucosas nasales. Si, en cambio, el valor del ph está bajo, se puede producir corrosión en las partes metálicas y problemas en las juntas.
Para aumentar el ph del agua es necesario añadir al agua un producto alcalino como el bicarbonato de sodio. En cambio, para disminuirlo, es necesario añadir un producto ácido como el clorhídrico.
Otros niveles de medición del agua a tener en cuenta son la alcalinidad, la dureza, la mineralización, el nivel incrustante del agua y la floculación.
A tener en cuenta…
Cuando compres productos químicos asegurate de leer bien las indicaciones de la etiqueta. No mezcles productos entre sí para evitar posibles reacciones. No diluyas el producto y evitá el contacto de los productos de la pileta con otros productos químicos.
Por último, te recomendamos que día a día analices el nivel de cloro y el ph de tu pileta para mantenerla limpia y desinfectada. Un buen mantenimiento de tu pileta cuida tu salud y te permite ahorrar dinero en reparaciones y limpiezas futuras.
